Con permiso de Ludwing

El pasado 29 de octubre fué el concierto de la novena de Bethoveen en el que participé. Fué con la Fundación Excelentia que es una organización que sigue los pasos de La Fundación La Caixa. Un poco atrás la verdad ya que la producción es algo más casera y se nota. Los lugares de ensayo son algo peores y todo está un poco cogido con hilos, pero la intención es buena.

 

Los ensayos los dirigió el maestro Corcuera que lo hace estupendamente y que también como muchos de nosotros hace doblete con La Caixa.

 

Y pensar que cuando Bethoveen compuso esta obra estaba ya sordo. Impresiona.

Lo de pedirle permiso al genio Ludwing es porque me gustó participar en esta obra, pero el esfuerzo y la dedicación de los ensayos me pareció poco recompesado con los sólo veinte minutos que escribió para coro. Bien es cierto que son espectaculares, pero estar sentado en los bancos del coro una hora y cuarto hasta que llegara el turno de cantar fué algo duro. El genio podía haber escrito algunas lineas más. Bueno, él sabría.

Javier Corcuera, el director.

Ensayo general en el auditorio.

El director fué Kynan Johns con la orquesta Santa Cecilia.

Johns es director Asistente de Lorin Mazzel y de Zubin Mehta en el Palau de les Arts “Reina Sofía” de Valencia.

La verdad es que los momentos más conodidos como la oda a la alegría -quizá demasiado popularizada y en muchos casos destrozada- fueron muy emocionantes.