Es la segunda vez que vamos a este estupendo festival callejero que pone a Valladolid como centro cultural de la zona con una disciplina de teatro que merece todo el respeto. Fantástico pasear por la calle, sentarse en una terraza, cenar y disfrutar de este estupendo festival.
Llegando a Valladolid.
El recuerdo a Don Miguel.
Movimiento 15-M en Valladolid.
Una casa pintada en la pared.
El mercado de toda la vida.
El domingo por la mañana temprano nada como conocer la ciudad vacía preparándose para el día que viene y correr un poco por sus solitarias calles provisto de música y cámara en el móvil.
De vuelta a Madrid una parada en Peñafiel.
Bodegas. Compra de vino y de vuelta a casa.
2 comentarios:
¡Que chulada de sitio, de fotos y de ambiente!
Merece la pena una escapada así.
Y estás hecho un artista, como siempre.
Sí, es una visita muy recomendable.
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